Quesos de corteza natural:
La corteza natural del queso se forma de manera espontánea durante la maduración, debido a la desecación de la superficie. Esta desecación se produce porque la humedad relativa de las cámaras de maduración es inferior a la que tiene el queso. En definitiva, la composición de la corteza es similar a la del interior del queso, con algunas diferencias debidas a la pérdida de agua y al desarrollo de algunos microorganismos. Entre los quesos de corteza natural podríamos hablar de los rulos de queso de cabra o el queso Camembert.
Algunos quesos cremosos como los mencionados presentan una superficie blanquecina, vellosa y con apariencia suave. Eso se debe a que tienen mohos en su superficie (principalmente Penicillium candidum) que pueden crecer de forma espontánea o añadirse de forma intencionada durante el proceso de elaboración. Cuando el proceso finaliza, la superficie se cepilla para eliminar parte de los mohos, hasta que finalmente queda una fina capa blanquecina. Supongo que estos quesos son los que plantean más dudas a la hora de decidir si la corteza se puede comer o no. Hay muchos tipos de queso con estas características, de manera que en algunos casos se puede comer la corteza y en otros es mejor quitarla (más que nada porque resulta desagradable, no pasaría nada por comerla siempre que se hayan mantenido unas condiciones óptimas de higiene). En general los quesos que presentan una corteza de este tipo se comen con ella (si es que te gusta), ya que los mohos de su superficie y los compuestos que éstos generan aportan aromas al queso que de otra forma se perderían.
http://www.gominolasdepetroleo.com/2011/10/se-puede-comer-la-corteza-del-queso.html
Me encanta el queso, todos todos.
ResponderEliminarYo, generalmente, suelo quitar la corteza aunque de algunos quesos blanditos no. Muchas gracias por tu información. Besitos
ResponderEliminar!Hola mi querida Norma!😄
ResponderEliminarMuy interesante tu post, me gustan los quesos pero sobre todo los frescos! bueno como dicen por ahí para gustos los sabores!!
Abrazo fuerte y se feliz nena!❤
Adoro el queso en todas sus variantes, desde el requesón al curado. Los tipo Camembert, Brie y de rulo de cabra están entre mis preferidos.
ResponderEliminarBesos
Yo los pelo un poquito, no desecho toda la corteza, sino lo más feo o estropeado, el resto lo aprovecho. Me encantan.
ResponderEliminarBss
Yo pasaría de pan con queso.
ResponderEliminarBesos.
Olá Norma
ResponderEliminarBem... que queijo fantástico!!!
Faz crescer àgua na boca.....
Bjs
Gostei de ler toda esta informação acerca dos queijos. Eu também sou apreciadora de alguns queijos. Beijinho e bom fim-de-semana.
ResponderEliminarHola Norma!.
ResponderEliminarComo siempre, una entrada muy interesante... gràcias.
En general, de los quesos blandos, suelo comerme la corteza; me gusta y aporta un sabor especial al queso.
Y de los que no me como la corteza, justo el trozo de queso pegado a ella, me suele gustar más :)
Besos y buen finde.