En principio la salivación es un estímulo asociado a la comida y su olor, pero el cerebro puede asociar la respuesta a estímulos de otro tipo como la vista, un simple recuerdo u otros más complejos según cada experiencia personal. La salivación se vincula a estímulos positivos, a alegría y emoción.
En principio la salivación es un estímulo asociado a la comida y su olor, pero el cerebro puede asociar la respuesta a estímulos de otro tipo como la vista, un simple recuerdo u otros más complejos según cada experiencia personal. La salivación se vincula a estímulos positivos, a alegría y emoción.
Gordon Proctor, profesor en biología salival del King’s College de Londres, explica qué nuestro cerebro produce más saliva con apenas el olor de un pan; y que además, la saliva contribuye a la digestión ya sin ella, sería casi imposible masticar y tragar alimentos. Protege a los dientes de bacterias y disminuye la propensión al desarrollo de infecciones como aftas, úlceras y enfermedades en las encías.
Aunque la saliva está compuesta en 99% por agua se encuentran hormonas como la testosterona, el cortisol y la melatonina. Además tiene minerales como calcio, electrolitos y componentes antibacterianos.
Sin duda, la saliva es uno de los fluidos corporales más importantes para mantener el correcto funcionamiento de nuestra boca y el resto del cuerpo.
mmmm!...Seguro que ya se te antojó comer pizza!
Ahora bien, ¿Cómo es la auténtica pizza italiana?
Súper finas costras horneadas en un horno de leña, abundante salsa de tomate fresco, cremoso queso de búfalo y coberturas frescas.
La base: Una auténtica base de pizza italiana es ligera, crujiente, delgada y, por supuesto, sabrosa. Hacer una auténtica base de pizza italiana es un arte que solo un verdadero romántico puede dominar. La forma en que sus muñecas amasan la masa blanda, girándola entre las palmas de las manos y haciéndola volar en el aire para lograr una corteza consistente y delgada es el resultado de años de práctica.
Las auténticas pizzas italianas requieren harina de pizza italiana especial (tipo ’00’ categoría, que es la variedad más fina y más refinada disponible). A continuación, la proporción de levadura y sal en la harina debe ser inequívocamente precisa. La masa debe descansar durante al menos 10 horas antes de estirarse y cocinarse en un horno de leña durante aproximadamente 3 ½ minutos para obtener un sabor distinto y dar la bienvenida a las ampollas por las que se conoce a las pizzas italianas.
La Salsa: Las pizzas italianas auténticas se basan en la salsa de tomate especial de nonna (¡que no se cocina en absoluto!). Esta rica salsa debe prepararse con tomates pelados, adherezados con sal, albahaca fresca y aceite de oliva virgen extra para obtener un sabor original.
El Queso: ¿Qué es una auténtica pizza italiana sin un rociado cuidadoso de fior di latte fresco y sabroso, o queso de búfalo! Le da a la pizza su textura distintiva, que cuando se contrasta con la corteza crujiente realmente sorprende y deleita las papilas gustativas. El queso de baja calidad arruina la autenticidad del sabor general de la pizza.
En síntesis: Una pizza italiana tradicional solo recurriría a algunas hojas de albahaca fresca que, junto con la salsa de tomate rojo y el queso blanco Mozarella di Bufala completan el tricolor de la bandera italiana.
¿En qué se diferencia tu receta a la tradicional?
En mi caso a mi marido no le gusta la masa fina y a mi síííí! y con mucho quesoooooo!
https://dafrancoacapulco.com/autentica-pizza-italiana/
http://www.planetacurioso.com/2016/10/13/por-que-se-nos-hace-agua-la-boca-cuando-se-nos-antoja-algo