Si leíste “El Principito”, lo más probable es que recuerdes los árboles
botella, conocidos popularmente como baobab. Estos árboles tienen ese
tronco particular para poder almacenar agua en las estaciones secas. Al
baobab se le conoce también como árbol de la vida, y con razón: provee
de refugio, agua y alimentos a los habitantes de las zonas en que crece.
Su corteza, similar al corcho, es muy resistente y se le emplea para
fabricar tejidos y cuerdas
Procedente
de África, no destaca por la belleza de su follaje ni por la vistosidad
y aroma de sus flores y frutos; más bien, carece de todo esto, y ahí
radica su encanto.
Con un aspecto casi prehistórico, aunque no alcanza las dimensiones de una secuoya gigante, lo cierto es que a su lado, cualquiera se siente pequeño.
Con un aspecto casi prehistórico, aunque no alcanza las dimensiones de una secuoya gigante, lo cierto es que a su lado, cualquiera se siente pequeño.
En efecto, parece un árbol invertido que, con sus ramas extendidas en orden anárquico, pretende implorar el perdón de los dioses.
Otra dice que en los
primeros días del mundo los dioses repartieron semillas entre todos los
animales para que las plantaran; las del baobab se la dieron a la hiena, ésta
un poco torpe, y enojada por haberlas recibido en último lugar, decidió
plantarlas al revés, lo que explicaría la extraña impresión que producen los
Baobabs, como si sus raíces estuvieran en el aire.
Su aspecto impresionó a Antoine de Saint-Exupéry de tal forma que los convirtió en los protagonistas de uno de los capítulos de su obra maestra, "El Principito". En uno de sus capítulos, éste y el piloto hablan acerca
de los baobab -tipo de árbol enorme que crece en África y en el planeta
del principito- y la necesidad de no permitir bajo ningún motivo que
crezcan, a riesgo de que provoquen una verdadera catástrofe. Esta
lectura remitió a pensar en los baobab como los pensamientos
irracionales (también conocidas como distorsiones cognitivas), aquellas
creencias que nos hacen distorsionar peligrosamente la realidad.
Hay que decir que no sólo el fruto es empleado en la cocina, las
hojas del árbol también se utilizan como ingrediente culinario o para la
preparación de infusiones. Existe una amplia gama de productos en los
que se encuentra presente el Babobab, aunque nosotros sólo hemos
conocido con más detalle la pulpa. También se comercializa en forma de
polvo, es decir, pulpa disecada que se puede consumir disolviéndose en
agua o en cualquier otro líquido alimentario.
Recientemente la Unión Europea aprobó la solicitud de comercializar la pulpa del Baobab
a PhytoTrade Africa, empresa que ofrecerá en Europa la pulpa
deshidratada del fruto del baobab como nuevo ingrediente alimentario. La
Unión Europea ha indicado que se trata de un producto seguro para el
consumo humano y su autorización permite disfrutar de un nuevo
ingrediente en la cocina. Para evitar cualquier problema, es interesante
tener en cuenta que las etiquetas informativas del nuevo producto deben
reflejar la denominación “pulpa del fruto del baobab”.
Por cierto, como curiosidad indicar que en Sudáfrica está el único bar del mundo que se encuentra dentro de un árbol del pan de mono (así también se lo llama), un bar que cuenta incluso con bodega y la ventilación adecuada. El árbol en cuestión tiene nada menos que 6.000 años de antigüedad y su diámetro es de 48 metros, debe ser toda una experiencia poderse tomar una cerveza dentro de este árbol.
o usarlo así
Para que no te quedes con las ganas, eso sí, si por allí lo conseguís
te dejo una receta
HELADO de BAOBAB (tiene un sabor ligeramente alimonado)
Ingredientes:
1 vaina de vainilla o esencia de vainilla,
400 ml de leche, 300 ml de crema de leche, 6 yemas de huevo, 200grs de azúcar, 4 cucharadas de polvo baobab.
Preparación: Combinar la leche y la crema en una olla. Dividir la vaina de vainilla por la mitad y raspar las semillas en la mezcla. Cuando empiece a hervir, retirar del fuego para que baje la temperatura mientras, batir el azúcar y las yemas de huevo hasta que estén esponjosas en un recipiente aparte . Verter la mezcla de leche caliente a la mezcla de azúcar y huevo mientras se agita rápido para que con el golpe de calor fuerte no se quemenla preparación de yemas.
Verter todo de nuevo en la olla y calentar a 85°, o sea hasta que desaparezcan las burbujitas o hasta que nape ligeramente la cuchara. No debe hervir para que no se corte. (Hasta aquí es la base de cualquier receta tradicional de helado) Añadir el polvo de fruta de baobab y revolver hasta que se disuelva .
Verter la mezcla en un bol y enfriar , por ejemplo , poniendo en un recipiente grande lleno de hielo y agua. A partir de aquí usá la heladora o la técnica de congelar que uses pero batir de cuando en cuando para que no cristalice.
http://www.diariosanrafael.com.ar/actualidad/29921-baobab-los-arboles-mas-reconocidos-del-mundo-cuentan-sus-historias
qué curioso!!! no tenía ni idea de lo que era un baobab, sólo conocía el nombre y la imagen, claro que nunca lo he tenido delante, jiji. Un abrazo.
ResponderEliminarEs precioso, vaya arbol mas impresionante, y su fruto se ve exquisito, sobre todo ese helado que preparaste.
ResponderEliminarCuantos recuerdos del libro "El principito", lo leí cuando era pequeña y me fascinó.
Besitos.
Impresionante!! Es precioso.
ResponderEliminarUn beso
Magnífica e interesantísima entrada.
ResponderEliminarUn abrazo
Es una pasada de arbol!!besos
ResponderEliminarUn relato muy interesante el que nos haces sobre el baobab, siempre me ha parecido un arbol muy curioso.
ResponderEliminarBesos
¡Qué interesante, Norma! a ver cuándo llega la pulpa por aquí y podemos empezar a utilizarla. Espero que además de la de hoy nos proporciones mas recetas para poder familiarizarnos con ello. Un beso.
ResponderEliminarMuy interesante, yo lo conoci gracias al Principito. Un beso
ResponderEliminarque bonita historia, la desconocía me ha gustado saber más del baobab
ResponderEliminarFeliz fin de semana
Hola Norma Gracias por pasar por mi blog yo tambien visite el tuyo y me encanto asi que me quede por a qui y si quieres me lo llevo al mio
ResponderEliminarEres de Argentina me encanta de hecho mis hijos nacieron alli hermoso pais me gusta
Besos mil
Muy interesante el tema que nos has traído hoy, un árbol muy impresionante tanto en su forma como en su tamaño.
ResponderEliminarY una buena información sobre sus orígenes y su uso en la alimentación .
Besos
Impresionante todo lo que cuentas del Baobab Norma, y que fotos maravillosas!
ResponderEliminarSuiempre muy entretenido tu Blog.
Besos, Dolly
Si que es curioso, muy interesante la informacion. besicoss y buen finde
ResponderEliminarHola! Te he conocido a través de la Linky Party de Lola Godoy :)
ResponderEliminarMe ha encantado tu blog y todo lo que haces y muestras. Por eso, te sigo sin lugar a dudas en GFC!
Yo también tengo un blog, http://encasadeoly.blogspot.com.es/, por si te apetece visitarme y seguirme también si te gusta :)
Un saludo!!
Ni idea de lo que era el baobad, a pesar de haber leido el principito. Muy buena informacion, gracias por compartirla!
ResponderEliminarBs!
Un árbol formidable y el aseo más original que he visto en mi vida.
ResponderEliminarSaludos cordiales
Ciao e buona domenica
ResponderEliminarUna magnífica entrada, Norma. Un saludo.
ResponderEliminarTan interesante como siempre, lo del helado ya veremos si puedo conseguirlo. Besos
ResponderEliminarQue información más curiosa, yo solo conocía este árbol por el libro de El principito y ni siquiera sabía que tenía fruto y se podía utilizar en recetas tan ricas como este helado. Muy interesante.
ResponderEliminarBss
Qué curioso!!! no sabía de su existencia. Muy interesante.
ResponderEliminarBesos
No sabía que fuera comestible, es bien curioso este árbol! y meterse dentro (en el bar) debe ser toda una experiencia.
ResponderEliminarUn beso.
Querida amiga, primero debo disculparme, estoy un poco alejada del blog por mucho trabajo y por las noches cansancio,,,,
ResponderEliminarMe encanto esta entrada, mu curiosa informacion
Un abrazo enorme, volvere pronto